Un proyecto de ley, aprobado esta semana en la Cámara de Diputados y que comenzará a ser discutido la próxima semana en el Senado, divide las opiniones de los especialistas en aviación en México. La propuesta, presentada en abril de 2022 por el presidente Andrés Manuel López Obrador, propone darle al ejército mexicano una facultad que de hecho ya tiene: vigilar y proteger los cielos del país. La ley propone aprovechar la capacidad de la Secretaría de la Defensa Nacional para canalizar recursos humanos, tecnológicos y materiales de las Fuerzas Armadas mexicanas. Una concesión más al Ejército que, de triunfar, profundiza su presencia en la vida civil del país y que calienta el debate sobre la supuesta militarización.
La iniciativa propone la creación de tres nuevos órganos de vigilancia y protección del espacio aéreo. Si bien las tres están conformadas por las secretarías de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes; Marina; Hacienda y Crédito Público y Defensa Nacional, la ley indica que el Ejército Mexicano coordinará la participación de todos los demás organismos.
“Es una ley absolutamente innecesaria. En primer lugar, la Constitución mexicana otorga todas las facultades al Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos para intervenir en el espacio aéreo por razones de seguridad. Esta ley ya nada es igual”, afirmó en entrevista telefónica, María Larriva, especialista en tráfico aéreo del país. Explica que desde la década de 1990, la Sedena cuenta con 4 instalaciones militares repartidas por todo el territorio que cuentan con radares que monitorean el espacio aéreo, además de que las autoridades de aviación civil comparten su información en tiempo real.
Larriva asegura que los diputados aprobaron una ley que no entendieron y señala que de los 484 legisladores mexicanos que estaban en sesión, 195 se abstuvieron de votar la iniciativa.
Por otro lado, especialistas como Pablo Casas, director general del Instituto Nacional de Investigaciones Jurídico-Aeronáuticas, ven ahora en los cielos la intención de que los militares le ganen más terreno a las autoridades civiles. “Es la militarización de los Servicios de Navegación en el Espacio Aéreo Mexicano”, señala. SENEAM es el organismo desconcentrado del Ministerio de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes que se encarga de regular la explotación, uso y aprovechamiento del espacio aéreo. “Con la ley, la Sedena es la coordinadora de todo, las autoridades administrativas se están subordinando a ellos”, dice.
Al jurista le preocupa que se estén duplicando facultades y advierte que si el Senado aprueba la iniciativa, habrá impugnaciones ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación. “Aquí se mezcla la aviación civil y militar. No es correcto integrarlos en una sola ley. Deben ser manejados en espacios aéreos diferenciados”.
También en entrevista telefónica para este medio, José Gerardo Alonso Torres, secretario de prensa y publicidad de la Asociación Sindical de Pilotos Aviadores de México (ASPA) considera que no hay problema con la iniciativa del presidente López Obrador y asegura que es bueno que se regule más lo que ya hizo la Sedena. “Creemos que está bien porque la Sedena se creó para proteger a los mexicanos. La Sedena ya lo hizo, pero ahora le están dando carácter de ley. El espacio aéreo también es parte del territorio mexicano”, indica.
Entrevistado este viernes en el Senado, Ricardo Monreal, coordinador de la bancada de Morena en la Cámara Alta, reconoció que la ley recién aprobada por los diputados necesita cambios para mejorarla y más discusión para entenderla mejor. “Conviene que convoquemos y hagamos comparecer a los funcionarios públicos que estén relacionados con el asunto”, explicó.
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