El asesinato de dos ciudadanos estadounidenses en Tamaulipas le ha dado a Estados Unidos otro argumento para presionar a México en la lucha contra los cárteles de la droga. El embajador de ese país en México, Ken Salazar, ha llamado a las autoridades mexicanas a incrementar la cooperación entre ambas naciones para hacer frente a las organizaciones criminales luego de que dos de los cuatro ciudadanos estadounidenses secuestrados el pasado viernes en Matamoros, Tamaulipas, fueran hallados muertos y los otros dos fueron rescatados este martes.
“Estos actos de violencia son un trágico recordatorio que nos obliga a reafirmar el compromiso de nuestros gobiernos de asegurar nuestra frontera compartida y fortalecer la lucha contra las organizaciones criminales transnacionales. Sabemos que es posible, y tenemos que lograrlo, ya que de ello depende el bienestar de nuestros ciudadanos”, dijo el diplomático en un mensaje compartido por la Embajada de Estados Unidos en México.
Salazar, hombre de confianza del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, también ha afirmado que las autoridades estadounidenses están dispuestas a trabajar con el Gobierno de México para que se encuentre y sancione a quienes han secuestrado y asesinado a los ciudadanos de Carolina del Sur. Hasta el momento, el secretario de Seguridad Pública y el gobernador de Tamaulipas, Américo Villarreal, han informado de la detención de una persona.
El embajador recuerda que el gobierno de Estados Unidos ha sido enfático en pedir a sus ciudadanos que no viajen a Tamaulipas, ya que representa un riesgo por los altos índices de delincuencia y violencia. “Nos preocupa especialmente el control que ejerce el Cártel del Golfo en la zona conocida como la frontera chica”, indicó. En su mensaje también lamentó los asesinatos de los dos ciudadanos y el dolor de los dos sobrevivientes. Medios estadounidenses han revelado que las víctimas son cuatro personas, tres hombres y una mujer, que viajaron a Matamoros acompañando a esta última para someterse a una cirugía estética.
Lo ocurrido abre otro frente en la relación entre Estados Unidos y México, ya de por sí compleja por temas como el narcotráfico, el tráfico de armas, el comercio y la migración hacia el país del norte. Recién el 12 de enero, el Partido Republicano presentó en el Congreso de Estados Unidos una iniciativa para autorizar a su Ejército a actuar contra los cárteles de la droga mexicanos, como el Cártel de Sinaloa o el Cártel del Golfo, que tiene fuerte presencia en Tamaulipas. .
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