Blanca Marsillach (Barcelona, 1966) es la hija menor de dos grandes del panorama: Adolfo Marsillach y Teresa del Río. Hay quienes aseguran que cuando decidió ser actriz el camino fue más fácil. Pero ha demostrado con creces que su apellido es una anécdota y que es una de las grandes.
Como una hormiga trabajadora que hace oídos sordos a las cigarras, se ha labrado una carrera como actriz y productora teatral con su propia compañía. ¿Su objetivo de ella? Acercar el teatro a los sectores menos favorecidos de la sociedad. Un ejemplo de ello es ‘Las Cosas Fáciles’, que iniciará su gira nacional el 26 de este mes en el Teatro Bellas Artes de Madrid.
En este proyecto colaboran la Compañía de Teatro Blanca Marsillach y la asociación CECA, a través del programa Funcas Educa. Es una obra de teatro escrita y dirigida por Alberto Velasco, apadrinada por Emilio Gutiérrez Caba, y protagonizada por Cristina Izquierdo y Sila Sicilia. “Se trata de una comedia creada para centrarse en el problema de las personas mayores a la hora de acceder al nuevo mundo financiero y proporciona herramientas para un envejecimiento activo en términos de su independencia económica y digital”, afirma Marsillach.
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«Mi plato favorito es el sushi. Estoy enamorado de la comida japonesa.
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«Desayuno zumo de naranja, plátano y tostada con aguacate y salmón»
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“Bebo mucha agua y hago mucho ejercicio, yoga y pilates para mantenerme en forma”
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«La mejor dieta es cerrar la boca. “No comas muchos carbohidratos ni dulces”.
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«Lo único que me obsesiona es no envejecer dignamente y ser una molestia para los demás»
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«Me enganché al tabaco y luego al vapeo. Pero lo dejé y me siento mucho mejor”.
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«Cuando tengo un momento de estrés recurro a la meditación, al yoga o al ejercicio en general»
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«La verdad es que no tengo vicios, soy aburrida en ese sentido… jajaja»
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«Siempre trato de lucir bien para dar mi mejor versión. “A veces cuesta más y otras veces cuesta menos”.
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«Hace mucho tiempo conté calorías y me salió negativo, tenía hambre»
A la hora de mantenerse, asegura empezar el día con un Buen desayuno lleno de energía: “Suelo desayunar zumo de naranja, un plátano, unos arándanos y unas tostadas con pan de espelta, aguacate y salmón”. Confiesa que no echa la siesta, que se trata más de “aprovechar la noche para dormir lo necesario y durante el día poder trabajar, hacer deporte y tener ocio”.
Su la mejor terapia antiestrés?: «Recurro a la meditación, al yoga o al ejercicio en general. “Es lo que me calma y me hace ver las cosas de otra manera”, afirma. Ella se considera enamorada de comida japonesa y respecto al ejercicio dedica cinco días a la semana «sobre todo a fortalecer su espalda. Me operaron hace años y ahora otra vez. Los ejercicios de Yoga y Pilates son los que más resultados me dan; El ‘cardio’ que suelo hacer ahora… me ayuda a mantenerme activa”, añade la actriz.